Heligábalo, el perverso emperador cuyos excesos eran demasiado para los romanos. La historia de Roma siempre ha estado llena de emperadores perturbados, sádicos y homicidas. Sin embargo, no todos fueron odiados. Figuras como Calígula fueron llamados por sus regalos. El pueblo romano toleraba a hombres malvados en el poder siempre que les proporcionaran pan, circo o dinero. Entonces, ¿qué hizo distinto a Heligábalo de otros emperadores romanos tiránicos? ¿Qué actos lo convirtieron en el emperador más repudiado de Roma?
El ascenso de Heligábalo al trono de Roma
Heligábalo, cuyo verdadero nombre era Vario Ático Basiano, no fue un noble y sacerdote romano. Nació en el año 203 después de Cristo y su ascenso al trono de Roma fue bastante peculiar. Después del asesinato del emperador Caracalla en el año 207, su tía materna, Julia Mesa, decidió armar una conspiración para derrocar a Macrino, el nuevo emperador responsable de la muerte de su predecesor. Fue por ello que convenció a su hija Julia Soemia de que renegara de la paternidad de Vario Ático Basiano y corriera el rumor de que era un hijo bastardo del fallecido emperador Caracalla.
Esta mentira captó la atención de los soldados romanos, quienes fueron al templo del dios solar El Gabal, situado en la ciudad de Emesa (actual Homs, Siria), para ver si había algo de cierto en los rumores sobre este joven sumo sacerdote. El gran parecido que había entre Basiano y Caracalla, así como la enorme suntuosidad de la vestimenta usada por el joven, hizo que muchos legionarios pensaran que era su hijo. Esto impulsó a que el centurión Publio Valerio Comazón convenciera a sus legionarios de colocarlo en el trono de Roma, dándole un golpe de estado a Macrino el 8 de junio del año 218 después de Cristo.
El emperador hereje
Uno de los hechos que hizo que el joven emperador Basiano se convirtiera en uno de los emperadores más odiados tuvo que ver con su sistema de creencias. En lugar de adorar a los dioses romanos tradicionales como Júpiter, Basiano introdujo en Roma el culto a su dios sirio El Gabal, un dios de la montaña cuya estatua trajo desde su ciudad natal en un viaje de dos mil millas a Roma.
El surgimiento de nuevos cultos no era algo nuevo en Roma, pero Basiano fue más lejos que otros emperadores. No solo asimiló a El Gabal dentro del panteón romano como el dios Sol Invictus, sino que lo casó con Minerva. Además, trató de que su culto reemplazara al de Júpiter y obligó a miembros de la aristocracia romana a participar en los ritos religiosos en honor de su deidad. Basiano era el sumo sacerdote de El Gabal.
Como si eso no fuera suficiente, el emperador se valió de unos cimientos sin acabar de un templo a Júpiter, iniciado por el emperador Domiciano en el monte Palatino, para construir un templo a El Gabal. Esta situación provocó incomodidad en el Senado, que no solo debía participar en un culto extranjero, sino que se vio obligado a colocar efigies de Basiano retratado como el dios de la luz. Los legionarios que trataron de rebelarse contra el nuevo culto fueron derrotados.
De acuerdo con los relatos de la época, Basiano llegó a mezclar vino con la sangre de incontables sacrificios de vacas, ovejas e incluso de niños patricios en honor a él y a El Gabal. También llevó a cabo un extraño asesinato masivo.
Controversiales matrimonios
Heligábalo tuvo varios matrimonios a lo largo de su vida. Su primer matrimonio, en el año 219 después de Cristo, fue arreglado por su abuela Julia Mamea con la hija de un prefecto de la Guardia Pretoriana de Roma llamada Julia Cornelia Paula. Sin embargo, el matrimonio acabó en divorcio al año siguiente debido a que ella tenía alguna clase de defecto físico que le desagradaba al emperador.
Varios meses después, Basiano contrajo matrimonio por segunda vez con la virgen vestal Julia Aquilia Severa. Su matrimonio con Severa fue controversial, ya que las leyes religiosas romanas obligaban a las vestales a permanecer vírgenes durante los primeros 30 años de servicio a la diosa Vesta, tras lo cual podían retirarse y contraer matrimonio. Aquellas que rompieran su voto de castidad eran condenadas a ser enterradas vivas. El matrimonio de Heligábalo con Severa fue una estrategia para introducir el culto al dios sirio El Gabal e integrarlo en la religión romana, no solo entre la élite, como había intentado hacerlo mediante decretos, sino también entre la gente común. Sin embargo, fue anulado por su abuela Julia Mamea.
Después de este nuevo divorcio, Basiano se casó con Annia Faustina, una aristócrata bisnieta del emperador Marco Aurelio y viuda de Pomponio Basso, un hombre al que el emperador mandó ejecutar recientemente. Heligábalo esperaba que Faustina le diera un heredero, pero al igual que sus otras esposas, no le dio hijos. A finales de 221, Basiano se divorció de Faustina por razones desconocidas y decidió volver a casarse con Julia Aquilia Severa, finalmente divorciándose de ella por segunda vez al año siguiente.
Luego, rompiendo con todos los tabúes de su época, contrajo matrimonio con dos hombres al mismo tiempo: Heracles, un esclavo griego rubio proveniente de la ciudad de Carhué, y Aurelio Sótico, un atleta griego de Esmirna famoso por su belleza. Este matrimonio bígamo acabó rompiéndose parcialmente luego de que Heligábalo envenenara a Aurelio Sótico, lo que llevó a que el emperador lo repudiara por no satisfacer sus deseos sexuales.
Defendiendo los derechos de las mujeres
Una de las peculiaridades de Heligábalo fue su defensa de los derechos de las mujeres. Tras ser nombrado emperador, permitió que su madre ocupara un escano en el Senado y fuera testigo de la redacción de los decretos elaborados por esta institución. Este hecho transformó a Heligábalo en el único emperador que, bajo su gobierno, admitió en el Senado a una mujer ocupando el mismo rango que un hombre. También institucionalizó un Senado para mujeres, ubicándolo en la colina del Quirinal, un lugar donde tradicionalmente se celebraban las reuniones de matronas.
Estas libertades para las mujeres se deben a que Heligábalo fue criado en una sociedad en la que las mujeres de alto rango tenían poder político y no eran simplemente amas de casa devotas de sus maridos. Sin embargo, esto iba en contra del statu quo de la sociedad romana.
Padecía de disforia de género
Otro de los aspectos más extraños de Heligábalo fue su disforia de género. Este trastorno, conocido en la actualidad, hace que los individuos perciban que su identidad de género no coincide con su sexo, es decir, los casos en los que una mujer se percibe como hombre o un hombre se percibe como una mujer. Esta condición psicológica llevó a Heligábalo a ofrecer una recompensa a los médicos de su época para que le operaran sus genitales y lo transformaran en mujer.
Además de vestirse con ropa de mujer, pintarse los ojos, depilarse y lucir pelucas, Heligábalo pidió a sus súbditos que lo llamaran emperatriz o reina y que le dieran el título de emperador a su amante. Según algunos relatos, llegó a circuncidarse en una de sus fiestas. En otras versiones, se dice que se auto-castró. Esto lo convierte en el primer transexual documentado de la historia.
Escándalos y muerte
Dion Casio dice que, además de vestirse de mujer, Heligábalo tenía por costumbre prostituirse en tabernas y prostíbulos e incluso reservó una habitación en el Palacio Imperial en cuyo umbral se desnudaba y se ofrecía a los que pasaban por el corredor. También abrió burdeles en su casa para sus amigos, clientes y esclavos. En otra ocasión, reunió a todas las prostitutas de la ciudad en el Foro Romano y se presentó ante ellas con traje de mujer y con pechos falsos prominentes. Luego procedió a arengar a la multitud reunida, instruyéndolos en prácticas sexuales y estimulantes, prometiéndoles premios generosos si cumplían con sus extrañas demandas sexuales. También abrió al público los baños imperiales para que pudieran disfrutar viendo a los usuarios bañarse desnudos.
Heligábalo nombró como su heredero a su primo Alejandro, pero este último fue aclamado como emperador por los soldados, lo que desencadenó un motín en su contra. Heligábalo y su madre fueron asesinados por los pretorianos. Sus edictos religiosos fueron revocados y se devolvió el ídolo de El Gabal a Emesa. Además, se prohibió que las mujeres acudieran a las reuniones del Senado y se decretó la damnatio memoriae sobre Heligábalo, es decir, se borró su nombre de casi todos los documentos y obras públicas. Sin embargo, algunos escritos y relatos de la época han permitido conocer su gobierno y legado.
La leyenda de Heligábalo
Durante la Edad Media, el gobierno de Heligábalo fue mencionado por los autores patrísticos Orosio y Jerónimo en la Antigüedad Tardía. En el Renacimiento, Giovanni Boccaccio dedicó un capítulo a la madre de Heligábalo, Julia Soemia Basiana, en su obra "De Claris Mulieribus". En el siglo XIX, José María Eça de Queirós aludió a los vicios y las perversidades de Heligábalo en su novela "El crimen del padre Amaro", mientras que Rubén Darío se valió de este personaje para satirizar la mediocridad de los políticos de su época en su obra poética "Prosas profanas". En el siglo XX, el escritor surrealista Antonin Artaud lo describió como el primer emperador anarquista en su ensayo "Heliogábalo o el Anarquista Coronado".
En conclusión, Heligábalo fue uno de los emperadores más peculiares de la historia de Roma. Fue el primer emperador transexual, bastante anarquista, que trató de destruir cientos de años de tradición para crear su propio culto. Un culto donde podía tener sexo con quien quisiera y se le reconocía como mujer si se castraba y asesinaba a las personas que participaban en sus fiestas. Si bien sus acciones fueron controvertidas y repudiadas en su época, su gobierno fue el primero que vio a las mujeres como iguales y les dio poder en una sociedad tradicionalmente patriarcal.
Tabla de contenido:
Tema | Párrafos |
---|---|
El ascenso de Heligábalo al trono de Roma | 1 |
El emperador hereje | 1 |
Controversiales matrimonios | 1 |
Defendiendo los derechos de las mujeres | 1 |
Padecía de disforia de género | 1 |
Escándalos y muerte | 1 |
La leyenda de Heligábalo | 1 |
Preguntas frecuentes (FAQs)
1. ¿Fue Heligábalo el primer emperador transexual de Roma?
Sí, Heligábalo es considerado el primer emperador transexual documentado en la historia de Roma.
2. ¿Cuáles fueron las creencias religiosas de Heligábalo?
Heligábalo adoraba al dios sirio El Gabal y trató de introducir su culto en Roma, fusionándolo con la religión romana tradicional.
3. ¿Cuál fue la forma de gobierno de Heligábalo?
Heligábalo gobernó como emperador de Roma y trató de imponer sus propias reglas y culto, lo que provocó descontento entre las clases conservadoras.
4. ¿Cuál fue el legado de Heligábalo?
Aunque su gobierno fue breve y controvertido, Heligábalo fue el primer emperador romano que otorgó poder a las mujeres y abogó por sus derechos en una sociedad patriarcal.
5. ¿Cómo murió Heligábalo?
Fue asesinado por los pretorianos después de un motín. Su cuerpo fue arrojado a las aguas del Tíber.
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¡Hola! Soy Javier L., un apasionado de la historia que ha encontrado en la escritura una vía para compartir y explorar los rincones más fascinantes de nuestro pasado. Cuando no estoy sumergido en algún libro o documento histórico, me encuentras plasmando mis descubrimientos y reflexiones en este blog. Creo firmemente que la historia no solo es una serie de fechas y eventos, sino un rico conjunto de historias y lecciones que aún resuenan hoy. ¡Espero que disfrutes leyendo tanto como yo disfruto escribiendo! Un saludo y gracias por acompañarme en esta travesía por el tiempo.
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