Los misterios de la Esfinge

21 secretos ocultos y misterios de la esfinge de Giza

La fascinante y misteriosa esfinge de Giza

La esfinge de Giza, ubicada en la meseta de Giza en Egipto, es una estructura imponente y misteriosa que ha desconcertado a expertos en arqueología y turistas por igual. Esta icónica estructura se eleva 20 metros sobre la arena del desierto y es considerada una de las maravillas del mundo antiguo. Pero lo que hace que la esfinge sea tan fascinante es la cantidad de misterios que rodean su origen y construcción: ¿en qué año fue construida realmente? ¿Quién la construyó y por qué? ¿Qué secretos oculta su interior?

Aunque se han realizado muchos estudios y teorías sobre la esfinge de Giza, todavía hay muchas preguntas sin respuesta. En este artículo, nos embarcaremos en un emocionante recorrido por los misterios y curiosidades de esta importante estructura. Exploraremos las diferentes teorías sobre su origen y te contaremos algunos de los descubrimientos más fascinantes que se han realizado. ¡Sigue leyendo para descubrirlos!

El complejo de Giza

La gran esfinge se encuentra en la meseta de Giza, a 10 km al oeste del Cairo, la capital de Egipto. En esta meseta se encuentra el complejo de pirámides de la cuarta dinastía del Antiguo Egipto, considerada la era dorada del imperio egipcio. Todo este complejo de Giza, incluyendo ruinas antiguas de Memphis, Sakara y Dandur, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979.

La única escultura sobreviviente del mundo antiguo

A diferencia de las pirámides cercanas, que fueron construidas con diversos bloques, la gran esfinge es en realidad una escultura muy enorme. Mide 20 metros de altura, 73 metros de largo desde la pata frontal hasta la cola y 19 metros en su sección más ancha. Pese a estas sorprendentes dimensiones, la esfinge no fue construida sino esculpida en una roca y con el tiempo ha sido restaurada con varias capas de bloques de piedra caliza. Estudios estiman que la creación de la esfinge debió tomar unos tres años, con alrededor de 100 trabajadores usando cincel y martillo para esculpir la figura. La escultura pudo haber sido más grande en el plan original, según lo indican rocas y equipos de trabajo hallados alrededor del área.

Alguna vez fue colorida

Si bien en la actualidad estamos acostumbrados al color arena de las pirámides y la esfinge, este pudo no ser su color original. Se cree que la gran esfinge pudo estar pintada con una paleta de colores primarios: amarillo, azul y rojo. Probablemente, el rostro era de un tono rojizo y el tocado en la cabeza era de color amarillo canario. De hecho, todavía se pueden ver restos de pintura roja en una de las orejas de la figura.

Basada en una criatura mitológica

La esfinge era una criatura de las mitologías griega y asiática, con cuerpo de león y cabeza humana. En Egipto, la esfinge usualmente se representaba como un hombre con tocado de faraón, mientras que en las mitologías griega y asiática, usualmente la esfinge tenía alas y era de sexo femenino.

No se conoce su nombre original

No hay registros históricos sobre el nombre original que tuvo la esfinge durante el Antiguo Reino de Egipto, también conocido como la era de las pirámides. Sin embargo, se sabe que durante el Nuevo Reino, también conocido como el Imperio Egipcio, la esfinge era venerada como una deidad solar.

El nombre de esfinge proviene del griego

Aunque la gran esfinge responde a las descripciones de la esfinge tradicional egipcia, el origen de esta palabra está en el griego antiguo. Se cree que proviene del verbo griego "esfingo", que significa "exprimir". Según la mitología griega, la esfinge solía plantear acertijos a quienes se cruzaran con ella. Aquellos que no respondían correctamente eran estrangulados por ella.

Le faltan dos partes del rostro

Si bien la escultura se ha mantenido por siglos, hay dos partes fundamentales de la cabeza que están desaparecidas: su nariz y la barba ritual. Aunque esta última se encuentra en exhibición en el Museo Británico, en su frente debería tener un ureo, una figura de cobre egipcia que debió formar parte del tocado y que se usaba como protección contra las fuerzas malignas. Toda la estructura de la esfinge tiene notorias señales de erosión y desgaste por el tiempo.

Un mito relaciona a Napoleón con la escultura

Por siglos, ha circulado la historia de que Napoleón Bonaparte fue responsable de la destrucción de la nariz de la gran esfinge. Sin embargo, hay múltiples registros históricos que desmienten esta versión. Por ejemplo, hay diversas pinturas anteriores a Napoleón que muestran la esfinge sin nariz. Además, un historiador árabe del siglo XV llamado Al-Maqrizi registró la nariz destruida de la escultura en uno de sus relatos. De acuerdo con este historiador, la pérdida de la nariz se debió a un extremista musulmán que atacó la escultura en el año 1378 y luego fue ejecutado por vandalismo. Sin embargo, esta versión también ha sido disputada. Un estudio arqueológico confirmó que la nariz de la esfinge fue destruida intencionalmente, pero estimó que el daño debió ocurrir entre los siglos III y X después de Cristo.

No se sabe quién esculpió la esfinge

Por siglos, ha habido debates sobre el autor o al menos quien dio la orden para la construcción de la esfinge. Básicamente, no se sabe con certeza. Algunos creen que la esfinge se hizo antes que las pirámides de la meseta, mientras que otros consideran que fue construida después. Aunque se han planteado diversas hipótesis, las evidencias son circunstanciales y no hay suficientes pruebas que confirmen algunas de las alternativas.

Se cree que representa un faraón

En líneas generales, el consenso histórico es que el rostro de la gran esfinge representa al faraón Kefrén, a quien se atribuye la construcción de la segunda pirámide de Giza. Pero hay historiadores que afirman que la escultura no tiene un parecido real con el antiguo monarca. De hecho, hay un sector de historiadores, arqueólogos y egiptólogos que creen que la escultura fue construida mucho antes de la era de Kefrén.

Es difícil establecer la fecha de su construcción

Así como no hay registros del nombre original de la esfinge, tampoco hay evidencias del período de su construcción. Determinar la era de su creación es complejo, pues no hay referencias a la escultura en ninguno de los documentos hallados hasta ahora. Si el rostro de la esfinge realmente representa al faraón Kefrén, esto ubicaría su construcción alrededor del año 2500 antes de Cristo. Sin embargo, no hay certeza al respecto y las teorías varían.

Hay diversas hipótesis sobre la escultura

Si bien está claro que la esfinge no fue construida sino esculpida, no hay certeza sobre el procedimiento usado para culminar la obra. Existe un debate entre quienes creen que se esculpió literalmente con cincel y martillo, otros creen que se usaron algún tipo de sierras, mientras que otros creen que se usó agua a presión contra la roca. Algunos historiadores creen que el valle que ahora es un desierto árido en algún momento fue una tierra fértil y con suficientes fuentes de agua, por lo que habrían usado agua en el proceso de esculpir la escultura.

La lluvia pudo causar erosión en la escultura

Existe una teoría que plantea que buena parte de la erosión y daños de la gran esfinge se debe al agua de lluvia. En lugar de arena movida por el viento, la idea es que fuertes lluvias pudieron haber causado daños a la esfinge. Esto implicaría que la escultura fue construida mucho antes del período de Kefrén, pues durante su reinado la región era bastante árida. Expertos en clima y ambiente creen que el último período de lluvias fuertes en la región de Giza ocurrió alrededor del año 4000 antes de Cristo. Si se aceptara esta hipótesis, el nivel de erosión indicaría que la esfinge fue construida mucho antes de lo que se cree, incluso alrededor del año 6000 antes de Cristo. Sin embargo, la mayoría de los egiptólogos consideran esta teoría como imposible, pues indicaría que Egipto tuvo un reino organizado y estructurado mucho antes de lo registrado hasta ahora.

Usos y significados cambiantes en el Antiguo Egipto

El significado e importancia de la esfinge ha cambiado con el tiempo. Se cree que en el Antiguo Egipto se usó como símbolo para adorar al sol alrededor del año 2500 antes de Cristo. Después, su significado comenzó a variar de acuerdo con las creencias de cada comunidad. Por ejemplo, los cananeos, una población politeísta que aparece en el Antiguo Testamento de la Biblia, solían creer que la esfinge representaba al dios Oron, uno de los dos dioses del inframundo.

Ignorada por varias culturas antiguas

Quizás uno de los misterios más inexplicables de la gran esfinge es por qué no hay registros de su existencia en otras culturas. El Antiguo Testamento registra muchos conflictos entre los cananeos y los israelitas, pero nunca se menciona siquiera la gran escultura. ¿Cómo es posible que una estructura tan imponente sea ignorada en las narrativas bíblicas? Si Moisés, su hermano Aarón o cualquiera de los israelitas que pisaron Egipto vieron la esfinge, definitivamente no consideraron importante mencionarla en los libros del Antiguo Testamento.

Dudas sobre el sexo de la esfinge

La barba original de la esfinge indica que la escultura seguía la forma de un hombre. Sin embargo, existen registros de visitantes entre los siglos XVI y XIX después de Cristo que describen la esfinge como la cabeza de una mujer. Esta descripción se encuentra en textos, pero también en bocetos y pinturas de artistas occidentales. George Sandys, un poeta y traductor inglés, afirmó en sus múltiples diarios de viaje que la esfinge tenía una apariencia similar a una prostituta. El escritor alemán Johannes Helf, contemporáneo de Sandys, describió a la esfinge como una mujer con pechos redondos. Antes de la Revolución Francesa, la gran mayoría de las imágenes en Europa representaban a la esfinge con una apariencia evidentemente femenina. Solo después de la invasión de Napoleón a Egipto, las imágenes de la esfinge en Europa comenzaron a cambiar su apariencia. Curiosamente, no fue sino hasta 1755 que las ilustraciones europeas comenzaron a reflejar la nariz destruida o ausente de la esfinge.

Protección y erosión

Es sorprendente que la gran esfinge haya sobrevivido milenios pese a la erosión de su detallada estructura. El daño y la erosión son evidentes, pero no hay duda de que la escultura mantiene buena parte de su estructura original. Durante una excavación en 2010, se encontró un muro de casi 132 metros alrededor de la estatua. Se determinó que esta construcción tenía el objetivo de actuar como cortavientos para evitar la erosión causada por el viento. Los arqueólogos y egiptólogos creen que este muro fue construido por orden del faraón Tutmosis IV con la meta de proteger la enorme escultura. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, la erosión y los daños en la estructura se están acelerando.

La desproporción de la cabeza

Uno de los aspectos más peculiares de la gran esfinge es la desproporción de su cabeza, la cual es considerablemente más pequeña que el resto del cuerpo. Se cree que no siempre fue así y que en realidad la cabeza de la esfinge era mucho más proporcionada con el resto de la escultura. Las investigaciones apoyan la hipótesis de que en realidad la cabeza de la esfinge fue tallada varias veces por diferentes faraones para tratar de mantener la estética de la escultura. De hecho, hay quienes piensan que la cabeza original de la escultura representaba un halcón o un carnero, no un humano.

Una puerta misteriosa

En marzo de 1993, un robot mecánico descubrió una pequeña puerta hecha de mármol, ubicada con dos manijas de cobre. El hallazgo fue realizado por el ingeniero robótico alemán, a quien posteriormente se le prohibió seguir investigando y abrir la puerta encontrada. Las autoridades de antigüedades egipcias afirmaron que este hallazgo no era significativo y que el investigador alemán filtró su descubrimiento a la prensa antes de documentarlo adecuadamente. Aunque el investigador alemán sostuvo que se trataba de una puerta y las autoridades egipcias negaron su existencia, la realidad es que no hay consenso sobre este hallazgo y su significado.

Habitaciones rotatorias bajo la esfinge

Esta no es una creencia, sino un hecho: investigadores y científicos encontraron tres habitaciones bajo la esfinge que se construyeron para ser usadas de manera rotatoria. Aunque actualmente estas habitaciones están cerradas, los expertos creen que fueron usadas para ceremonias religiosas alrededor del año 1500 antes de Cristo. Estos cuartos pudieron usarse como una especie de calendario para los egipcios. Sin embargo, es importante mencionar que no se han realizado más excavaciones en el área para investigar a fondo.

Pasajes secretos de la esfinge

Existen diversas leyendas sobre pasajes secretos ocultos bajo esta gran escultura, y algunas investigaciones han encontrado anomalías en el área que rodea la gran esfinge. Sin embargo, la mayoría de estas anomalías pueden explicarse por hechos naturales. En 1995, un grupo de trabajadores que renovaba un estacionamiento cercano reveló una serie de túneles y pasajes secretos, uno de los cuales estaba muy cerca de la esfinge. El investigador Roberto Bauval cree que estos pasajes son de la misma era de la esfinge. Entre 1991 y 1993, un equipo de investigadores que usaba un sismógrafo para examinar la erosión de la esfinge encontró evidencias de anomalías, espacios vacíos y cámaras de algunos metros bajo tierra. Sin embargo, no se han realizado más excavaciones en el área para seguir investigando estos posibles pasajes secretos.

La supervivencia de la esfinge

La pregunta sobre si la esfinge podrá sobrevivir a nuestra era moderna es difícil de responder. Mientras que estas estructuras antiguas nos fascinan, también es evidente que es difícil mantenerlas en buen estado. La contaminación que emana de la ciudad de El Cairo, sumada a la humedad, los vientos y el cambio climático, tienen un impacto innegable en el estado de la gran esfinge. La erosión y los daños en la estructura se están acelerando, y hasta ahora ha fallado todos los intentos de restaurar o sustituir las piezas perdidas por otros materiales. El Consejo Supremo de Antigüedades de Egipto está a cargo de proteger la esfinge, las pirámides y las muchas estructuras icónicas del Antiguo Egipto. Sin embargo, la lucha por su preservación continúa.

Sumario de los 21 secretos y misterios de la esfinge de Giza

Preguntas frecuentes sobre la esfinge de Giza

1. ¿Cuál es el origen de la palabra "esfinge"?

La palabra "esfinge" proviene del griego antiguo y se cree que deriva del verbo griego "esfingo", que significa "exprimir". Según la mitología griega, la esfinge solía plantear acertijos a quienes se encontraban con ella.

2. ¿Cuándo fue construida la esfinge?

La fecha exacta de construcción de la esfinge de Giza aún es incierta. Sin embargo, se estima que fue construida alrededor del año 2500 antes de Cristo, durante el reinado del faraón Kefrén.

3. ¿Quién construyó la esfinge?

Aunque hay teorías y especulaciones sobre quién pudo haber construido la esfinge, no hay pruebas concluyentes sobre su autoría. Algunos creen que fue construida antes que las pirámides de Giza, mientras que otros piensan que fue construida después. La respuesta definitiva sigue siendo un misterio.

4. ¿Por qué faltan la nariz y la barba ritual de la esfinge?

No se sabe con certeza por qué falta la nariz de la esfinge. Hay diversas teorías, incluyendo la destrucción intencional, pero no existe evidencia concluyente sobre su desaparición. La barba ritual también está ausente en la escultura, aunque se encuentra en exhibición en el Museo Británico.

5. ¿Cómo se ha conservado la esfinge a lo largo del tiempo?

Aunque la esfinge ha sufrido erosión y daños a lo largo de los siglos, se han realizado esfuerzos para protegerla. Un muro construido alrededor de la estatua sirve como cortavientos para evitar la erosión causada por el viento. Sin embargo, los factores ambientales, como la contaminación y el cambio climático, continúan representando un desafío para su conservación.

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Fuentes:

1. Archivos y conocimientos del autor.

2. Estudios arqueológicos y egiptológicos.

3. Investigaciones de expertos en el campo.

Imagen de la esfinge de Giza tomada por el autor.

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Javier L.

¡Hola! Soy Javier L., un apasionado de la historia que ha encontrado en la escritura una vía para compartir y explorar los rincones más fascinantes de nuestro pasado. Cuando no estoy sumergido en algún libro o documento histórico, me encuentras plasmando mis descubrimientos y reflexiones en este blog. Creo firmemente que la historia no solo es una serie de fechas y eventos, sino un rico conjunto de historias y lecciones que aún resuenan hoy. ¡Espero que disfrutes leyendo tanto como yo disfruto escribiendo! Un saludo y gracias por acompañarme en esta travesía por el tiempo.

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