15 Crueles Castigos de la Antigua Roma

Introducción

El imperio romano dejó importantes contribuciones a la humanidad en áreas como el derecho, la ingeniería, el comercio y las artes militares. Sin embargo, también se caracterizó por aplicar castigos inhumanos que ponen los pelos de punta. Estos suplicios iban desde las palizas y flagelaciones aplicadas a los esclavos por infracciones menores hasta diversos métodos de ejecución, cada uno más cruel y perverso que el otro. En este artículo, vamos a revisar los 15 castigos más perturbadores en la antigua Roma, y seguramente te enterarás de cosas escalofriantes.

Número 1: Baña Culey: El saco de cuero

Este horrendo método de ejecución en la Roma antigua estaba reservado a los culpables del delito de parricidio. Consistía en introducir al condenado en un saco de cuero, que luego sería cocido y arrojado a un río. Primero, la persona era azotada y su cabeza se cubría con una bolsa de piel de lobo. Luego, se ponía dentro del saco acompañado de un surtido de serpientes y otros animales vivos que lo acompañaban hasta la muerte. Este castigo fue utilizado especialmente durante el reinado de Adriano, y posteriormente rescatado por Constantino el Grande en el siglo III. Fue descontinuado en el siglo VI.

Número 2: Despeñamiento desde la Roca Tarpeya

La Roca Tarpeya era una abrupta pendiente situada en el lado sur de la colina Capitolina con vista al antiguo Foro Romano. Este lugar, que ofrece una magnífica vista, atraía a los infortunados que llegaban atados a la cima del acantilado, ya que estaban a punto de sufrir una horrenda muerte por despeñamiento. Este castigo fue popular durante la Roma republicana y se aplicaba particularmente a traidores y asesinos.

Número 3: Muerte en la hoguera

La muerte en la hoguera solía aplicarse a los reos por herejía, brujería, traición, violación y robo. Era utilizada preferiblemente para ejecuciones colectivas. Durante el Imperio Bizantino, la hoguera fue el destino de muchos paganos debido a la creencia de que eran adoradores del fuego. Durante el Gran Incendio de Roma en el año 64, Nerón convirtió la capital imperial en una inmensa hoguera contra los cristianos, matando a un número no precisado de personas.

Número 4: Muerte del barril

El prisionero era embadurnado con una mezcla de leche y miel, introducido en un barril estrecho en el que solo le sobresalía la cabeza. El barril con el cuerpo era expuesto a la luz del sol y pronto gran cantidad de alimañas macroscópicas y microscópicas acudían al llamado del dulce manjar. A las dos semanas, el infortunado era un horrible espectáculo sanguinolento que suplicaba el momento de la muerte. Esta forma de ejecución fue aplicada especialmente a los cristianos durante el gobierno de Tito Flavio Domiciano en el siglo I.

Número 5: La tortura del burro

En este suplicio, uno de estos animales era muerto y destripado, extrayendo todos sus órganos hasta dejar solo una cavidad. A continuación, el condenado era desnudado e introducido en el hueco del asno, seguidamente se cosía en las partes de piel para que la persona quedara encerrada solo con la cabeza afuera. Los restos del animal con su macabro contenido eran puestos al sol, acelerando la descomposición. Mientras tanto, aparecían cientos de gusanos y alimañas que empezaban a alimentarse del burro y del hombre. Curiosamente, esta tortura fue descrita por el escritor romano del siglo II, Apuleyo, en su novela "El Asno de Oro", que no tiene nada que ver con la tortura del burro.

Número 6: Muerte por picaduras de abejas

Este suplicio consistía en colgar a una persona desnuda y atada de pies y manos en un cesto que luego era colgado de un árbol con un enjambre de abejas. Los perpetradores romanos molestaban a los insectos para estimular su defensa y las abejas atacaban a la persona dentro del cesto, propinándole miles de picaduras que podían provocarle la muerte. A menudo, el castigado era bajado del árbol cuando los castigadores consideraban que ya había tenido suficiente.

Número 7: Vertido de oro fundido en la garganta

Este brutal procedimiento fue utilizado en la antigua Roma como castigo para aquellos considerados insaciables en su deseo de riqueza. Consistía en verter oro fundido en la garganta de la persona, ocasionando quemaduras internas y vapores tóxicos que provocan una muerte atroz. Marco Licinio Craso, el hombre más rico de Roma en su tiempo, fue sometido a este castigo después de su muerte.

Número 8: Muerte por ebullición

Este método consiste en la ejecución de una persona hirviéndola en un líquido, generalmente agua, aceite o brea líquida. Se utiliza un gancho y una polea para sumergir al condenado y eventualmente sacarlo de la olla para observar cómo avanza la siniestra cocción. Los romanos aplicaban la muerte por ebullición especialmente a violadores, asesinos y falsificadores de moneda. Este método también fue utilizado por otros regímenes, como el de Islam Karímov en Uzbekistán, y Sendero Luminoso en Perú.

Número 9: Desgarramiento por animales salvajes

El desgarramiento por animales salvajes era tanto un método de ejecución como un espectáculo público en la Roma republicana e imperial. Era una pena capital de amplia utilización en la que los condenados eran dejados a merced de leones, leopardos, panteras y otros grandes felinos en las arenas y circos romanos. Aunque los romanos no inventaron este suplicio, lo observaron en sus colonias asiáticas y lo exportaron a la capital imperial.

Número 10: Decimación del ejército romano

La sanción más brutal del ejército romano era la decimación, que consistía en ejecutar al 10% del grupo castigado. Esta medida era reservada a casos de extrema cobardía o amotinamiento y se llevaba a cabo mediante un sorteo. El 90% que salvaba la vida era castigado enviándolo a dormir fuera del campamento, lo cual podía ser peligroso en territorio enemigo. Roma decidió eliminar este castigo extremo debido a su efecto desastroso en la moral del ejército.

Número 11: Estrangulamiento

El estrangulamiento provoca la muerte por asfixia mediante la compresión de las arterias carótidas o la tráquea. Fue uno de los métodos de ejecución más utilizados en la historia, tanto legal como ilegalmente. Los romanos lo empleaban principalmente como castigo ritual contra enemigos de alto nivel vencidos.

Número 12: Crucifixión

La crucifixión es el método de ejecución más famoso de la Roma imperial. Fue utilizado antes y después de Cristo, y consiste en clavar a una persona en una cruz donde sufre una lenta y cruel agonía hasta la muerte. Este castigo era comúnmente utilizado para los enemigos del imperio, los esclavos condenados a muerte y los piratas.

Número 13: Condena Homo Sacer

Las personas condenadas como Homo Sacer perdían sus familias y propiedades, que eran confiscadas por el gobierno para financiar obras y gastos relacionados con los dioses. Cualquiera podía matar a un Homo Sacer con total impunidad. Fue una especie de sistema de justicia popular que surgía en los orígenes de Roma cuando la república aún no tenía las fuerzas permanentes necesarias para mantener el orden y cumplir la ley.

Número 14: Palizas y otros castigos menores

Los castigos romanos más comunes, que no necesariamente eran mortales, eran las palizas y flagelaciones aplicadas a los esclavos por infracciones menores. Además, algunos delincuentes menores pagaban sus fechorías realizando trabajos forzados en las canteras, mientras que los esclavos considerados incorregibles eran vendidos y entrenados como gladiadores.

Número 15: Enterramientos vivos

Se cuenta que el emperador bizantino Anastasio I se quedó un día en su palacio de Constantinopla, perdió el sentido y fue enterrado vivo. Aunque esta historia probablemente sea falsa, el miedo a ser enterrado vivo es una fobia común. En la antigua Roma, el enterramiento de seres humanos vivos se practicaba como un martirio reservado a las vírgenes vestales que perdían la virginidad durante su servicio.

Tabla resumen

FAQs (Preguntas frecuentes)

¿El castigo del saco de cuero fue utilizado solo en la antigua Roma?

Si bien se documenta su uso en la antigua Roma, también se practicó en otras culturas antiguas, como la griega y la egipcia.

¿Qué pena podía llevar a la muerte por decapitación?

La decapitación era una pena reservada a los enemigos del imperio y a los esclavos que asesinaban a su amo.

¿Cuál era el objetivo de la condena Homo Sacer?

El objetivo de esta condena era la confiscación de las propiedades de las personas condenadas y la financiación de obras y gastos relacionados con los dioses.

¿Existen registros de los efectos psicológicos de estos castigos en la sociedad romana?

No existen registros precisos sobre los efectos psicológicos de estos castigos en la sociedad romana, pero es probable que generaran un impacto de temor y sumisión en la población.

Despedida

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Javier L.

¡Hola! Soy Javier L., un apasionado de la historia que ha encontrado en la escritura una vía para compartir y explorar los rincones más fascinantes de nuestro pasado. Cuando no estoy sumergido en algún libro o documento histórico, me encuentras plasmando mis descubrimientos y reflexiones en este blog. Creo firmemente que la historia no solo es una serie de fechas y eventos, sino un rico conjunto de historias y lecciones que aún resuenan hoy. ¡Espero que disfrutes leyendo tanto como yo disfruto escribiendo! Un saludo y gracias por acompañarme en esta travesía por el tiempo.

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