El imperio sasánida fue el gran enemigo del imperio romano. Durante 427 años, desde el año 224 hasta su caída frente a la invasión árabe islámica, los sasánidas gobernaron un vasto territorio en el continente asiático, que abarcaba los actuales territorios de Irán, Irak, Azerbaiyán, Afganistán y Armenia, así como partes de Siria y Pakistán, la península árabe, Asia central y el Cáucaso.
El imperio sasánida fue el segundo imperio persa, que surgió casi 800 años después del imperio liderado por Ciro el Grande y Darío I. Su influencia se extendió a Occidente a través del arte, cuando los musulmanes vencieron a los sasánidas y absorbieron su cultura, divulgándola por Europa y el norte de África.
El Primer Periodo de Esplendor
En la primera edad de oro del imperio sasánida, en el siglo cuarto, ocurrió un hecho curioso: el primer soberano que fue coronado antes de nacer. Después de la muerte de Ormuz II en 309, hubo una lucha por el poder entre la nobleza irania y la familia real. Una de las esposas del monarca fallecido estaba embarazada y su hijo, Sahapor II, fue coronado simbólicamente colocando la corona sobre el vientre de su madre. Durante su infancia y adolescencia, gobernó a través de su madre y la nobleza, pero al hacerse adulto demostró tener méritos propios para encargarse del imperio. Derrotó a los árabes y aseguró las fronteras sasánidas por el sur, lanzando además su primera campaña hacia el oeste, para presionar territorios romanos.
Accedió al fuerte romano de Chingar, en el extremo norte de Mesopotamia, pero tuvo que retirarse al enfrentar hostigamientos de las tribus nómadas aliadas de Roma. Sin embargo, logró firmar una tregua con el emperador romano Constantino II. Después, se dirigió a Transoxiana, una zona vital de la Ruta de la Seda que había caído bajo el control de guerreros nómadas. Derrotó a las tribus de Asia Central y se apoderó de la región, penetrando incluso en Turkestán y China. En 359, Sahapor II lanzó una nueva campaña contra Roma y, esta vez, venció a los romanos, arrebatándoles cinco provincias
Sahapor II murió en 379, dejando un imperio sasánida más extenso y consolidado. Había derrotado a sus enemigos en el este y oeste, y sometido a Armenia. Durante el periodo de 70 años aproximadamente que siguió a su muerte, entre 379 y 449, el imperio vivió un periodo de estabilidad, solo ocasionalmente enfrentándose a bizantinos.
Sahapor II fue reemplazado por su hermanastro Ardashir II, y luego por su hijo Shapur III. Ninguno de estos emperadores estuvo a la altura de Sahapor II, pero el imperio se mantuvo estable
El Segundo Periodo de Esplendor
El segundo periodo de esplendor del imperio sasánida comenzó cuando Yezdegird III ascendió al trono en 632. Sin embargo, ese mismo año los primeros escuadrones árabes islámicos comenzaron a presionar el territorio persa. A pesar de que los persas derrotaron a los árabes en la batalla del Puente en 634, fueron incapaces de resistir la presión musulmana. Los islámicos contraatacaron y, al mando de Khalid ibn al-Walid, líder militar y compañero de Mahoma, derrotaron a los persas en 637 en la batalla de al-Qadisiyyah.
La debacle sasánida facilitó la conquista islámica y ayudó a conformar el mapa religioso mundial actual. Si el imperio sasánida no hubiera estado tan agotado, dividido y carente de liderazgo, su famosa caballería asawira podría haber derrotado a los árabes. La influencia sasánida se extendió después de su caída, ya que muchos persas que no estaban dispuestos a convertirse al islam emigraron al oeste de India, donde fundaron la comunidad parsi que aún practica el zoroastrismo.
Impacto en la Cultura
El imperio sasánida tuvo un gran impacto en la historia del arte, especialmente a través de sus creaciones arquitectónicas y textiles. La influencia artística sasánida trascendió las fronteras del imperio, llegando a Asia Central, China e incluso Francia. Los sasánidas destacaron en el arte textil, creando sedas, brocados, bordados, tapices, damasquinados, techados y alfombras de gran fama. También dejaron un legado en la arquitectura, desarrollando técnicas para colocar cúpulas circulares sobre bases cuadradas.
Además de su arte, el imperio sasánida tuvo influencia en otros aspectos culturales. Los estudiosos sasánidas se interesaron por la filosofía griega y se cree que fueron ellos quienes hicieron traducir las obras de Platón y Aristóteles al persa. Asimismo, fundaron escuelas de medicina y se convirtieron en importantes centros intelectuales que atraían a estudiantes y profesores de todas partes.
Tabla de Resumen
| Periodo | Imperio Sasánida |
|---|---|
| Origen | Año 224 |
| Duración | 427 años |
| Territorio | Irán, Irak, Azerbaiyán, Afganistán, Armenia, Siria, Pakistán, Península Arábiga, Asia Central, Cáucaso |
| Primer periodo de esplendor | Siglo IV - Siglo V |
| Segundo periodo de esplendor | Principios del siglo VII |
| Causa de la caída | Invasión árabe islámica (651) |
| Legado | Influencia en el arte y la arquitectura |
Preguntas Frecuentes
1. ¿Cuál fue el imperio enemigo del imperio romano?
El imperio sasánida fue el gran enemigo del imperio romano.
2. ¿Cuánto tiempo duró el imperio sasánida?
El imperio sasánida duró aproximadamente 427 años, desde el año 224 hasta la invasión árabe en 651.
3. ¿Cuál fue el territorio del imperio sasánida?
El imperio sasánida abarcaba los actuales territorios de Irán, Irak, Azerbaiyán, Afganistán, Armenia, Siria, Pakistán, Península Arábiga, Asia Central y el Cáucaso.
4. ¿Cuáles fueron los periodos de esplendor del imperio sasánida?
El primer periodo de esplendor ocurrió en el siglo IV y V, y el segundo periodo de esplendor tuvo lugar a principios del siglo VII.
5. ¿Cuál fue la causa de la caída del imperio sasánida?
El imperio sasánida cayó debido a la invasión árabe islámica en 651.
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¡Hola! Soy Javier L., un apasionado de la historia que ha encontrado en la escritura una vía para compartir y explorar los rincones más fascinantes de nuestro pasado. Cuando no estoy sumergido en algún libro o documento histórico, me encuentras plasmando mis descubrimientos y reflexiones en este blog. Creo firmemente que la historia no solo es una serie de fechas y eventos, sino un rico conjunto de historias y lecciones que aún resuenan hoy. ¡Espero que disfrutes leyendo tanto como yo disfruto escribiendo! Un saludo y gracias por acompañarme en esta travesía por el tiempo.
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